New Technology can Save Lives
Una nueva técnica puede salvar la vida de los pacientes que por distintas razones necesitan respiración asistida. Se trata de un indicador portátil de dióxido de carbono, tan pequeño que cabe en el bolsillo de la camisa, y que da la alarma tan pronto como detecta una anomalía en el aire de espiración. Esta técnica ha mostrado su valía en situaciones de emergencia, tales como en transportes en ambulancia, operaciones o traslados entre salas de hospital, cuando no se dispone de equipo de monitorización fijo.
El nuevo instrumento de medición colorimétrica ha sido elaborado por un equipo de investigadores en Gibeck, empresa sueca de técnica médica que goza de una buena reputación internacional en el campo de la anestesia y los cuidados intensivos. El indicador de dióxido de carbono, basado en la tecnología Colibri patentada por la empresa, muestra el contenido de dióxido de carbono en cada respiración mediante modificaciones instantáneas del color.Cuando todo funciona perfectamente, el indicador cambia de azul (cantidad insignificante de dióxido de carbono) a amarillo (contenidos de como mínimo cuatro por ciento). No obstante, si presenta un color verde oscuro, verde o amarillo verdoso será indicación de peligro.
La nueva técnica es tan simple que no se necesita competencia médica especial para usarla. Además, el instrumento puede meterse rápida y fácilmente en un maletín de emergencia, se conecta con facilidad directamente al equipo de respiración y es robusto y fiable según diversas pruebas clínicas independientes.
Para citar un ejemplo, el profesor de medicina Michael Frass, del Hospital Universitario de Viena, lo ha probado en más de 150 pacientes, niños y adultos. El indicador de dióxido de carbono reaccionaba instantáneamente cuando la máscara de anestesia no estaba hermética, cuando la máscara laríngea no estaba en posición correcta y en caso de intubación incorrecta, cuando el tubo endotraqueal había entrado accidentalmente en el esófago en vez de en la tráquea.
Todos los médicos desean tener la seguridad de que el paciente recibe ventilación adecuada continuamente, y no hay duda de que la medición del contenido de dióxido de carbono en el aire de la respiración es uno de los métodos más fiables para la entubación, según el Dr. Michael Frass.
Reduce los riesgos
La monitorización del dióxido de carbono es actualmente un método corriente para reducir los riesgos de la ventilación artificial. En varios países constituye incluso un requisito obligatorio, dado que a veces surgen fallos en los aparatos y en el sistema de mangueras -puede producirse una fuga por un acoplamiento o soltarse una manguera, con graves consecuencias si no se detecta a tiempo.
En tales situaciones es equipamiento estándar el capnógrafo, un instrumento eléctrico para medir el dióxido de carbono, aunque es voluminoso y costoso de adquirir. En el Norte de Europa, casi todos los pacientes conectados a un respirador o ventilador, son vigilados por un capnógrafo, pero durante los traslados dentro y fuera del hospital no se suele disponer de esta tecnología.
Todos los instrumentos de medición colorimétrica diseñados anteriormente, como complemento u opción del equipo estándar, han tenido problemas debido a su muy corta vida de servicio y a que el proceso químico se interrumpe por el contacto con el aire húmedo de la espiración.
Los investigadores de Gibeck han conseguido modificar la estructura química, de forma que al indicador de dióxido de carbono no le afectan la humedad ni los gases anestésicos. Se ha prolongado la vida de servicio del indicador a 24 horas en medición continua. El indicador reacciona además con tal rapidez que puede registrar el contenido de dióxido de carbono hasta 50 respiraciones por minuto.
En el masaje pulmonar y cardiaco, el indicador de dióxido de carbono proporciona una buena imagen del progreso del intento de reanimación. Si aumenta sucesivamente el contenido de dióxido de carbono, es indicación de que el masaje cardiaco ha puesto en marcha la circulación de la sangre y con ello el vital intercambio de gas en el pulmón. De la misma manera, el color azul o verde oscuro inalterado es señal de que ha llegado el momento de interrumpir el intento de reanimación.
Ilustración 1: La tecnología Colibri ha demostrado su valía en situaciones de emergencia, tales como los transportes en ambulancia.
Ilustración 2: En caso de paralización del corazón, el indicador de dióxido de carbono proporciona una buena imagen del progreso del intento de reanimación. Si aumenta sucesivamente el nivel de dióxido de carbono, será confirmación de que el masaje cardiaco ha puesto en marcha la circulación de la sangre.
Para más información, sírvanse contactar con:
Anders Möllstam, Jefe de Marketing en Icor, filial de Gibeck
Ulvsundavägen 178 B, S-168 67 Bromma, Suecia
Teléfono: +46-8 764 59 00. Fax: +46-8 98 28 75
Press release images
New Technology can Save Lives
New Technology can Save Lives
Feedback is not allowed / disabled for this press release.